Hoy 12 de octubre,  es un día para festejar la fraternidad y colaboración entre los pueblos, la integración de gentes y culturas. Un día que demuestra el valor y la importancia de ese proyecto común que nos une y que llamamos España. Una nación que tiene en su propia historia, la historia de un mestizaje.  Esta variedad constituye nuestra más grande riqueza. 

Juntos, hemos logrado surgir como la segunda lengua más hablada, escuchada, escrita y cantada del planeta. Juntos, hemos sabido inventar nuevas formas artísticas y culturales. Y que está formada por diversos pueblos, con sus particularidades y personalidad, pero unidos.  Solo unidos fuimos importantes y solo unidos iremos a más. Unidos no quiere decir uniformes, sino solidarios entre todos los pueblos de España, acogidos bajo la Constitución de la concordia, de la tolerancia, de la autonomía y del progreso, amparados bajo la bandera de la legalidad que a todos nos protege, que a todos nos une y que a nadie excluye o separa. 

Este Día de la Hispanidad es, el día de la cooperación y de la solidaridad entre los españoles, que nos otorga el inmenso potencial, cultural y económico de hablar un mismo idioma, tener iguales  costumbres, respetar similares tradiciones y pensar y sentir de un modo semejante. 

El 12 de octubre es un día de reflexión histórica y de diálogo intercultural para dejar atrás formas de pensamiento discriminatorias y renovar el compromiso por el respeto a los derechos humanos de todos los pueblos.

También hay que destacar la labor de los responsables de nuestra seguridad; esto es, de todos los hombres y mujeres que velan por proteger nuestros derechos y libertades. En concreto, quiero destacar a la Guardia Civil, cuya fiesta celebramos hoy, pero también a nuestra Policía Local, que han colaborado codo con codo para garantizar nuestra seguridad. Estos cuerpos son una garantía de unidad, de respeto a nuestro orden constitucional y a los símbolos de nuestra nación. Es momento de mirar al futuro desde la unidad, desde el respeto y con lealtad a todas las instituciones del Estado.

Debemos estar orgullosos de pertenecer a esta gran nación que es España. Un país fuerte, que ha resistido momentos especialmente complicados a lo largo de su historia. Una nación sólida gracias al compromiso y sentimiento de pertenencia a un proyecto común que sentimos millones de españoles.

La bandera  española representa esa apuesta por la concordia y el respeto; es la bandera de todos, la que representa el proyecto común de una España que cree en la democracia, que durante más de cuatro décadas ha aportado a nuestro país, las herramientas necesarias para avanzar con firmeza en desarrollo y bienestar social.